Pujoleando

La historia del robo, reconocido sólo en parte por Pujol está empezando a parecer ya una película, pero una película entre El Padrino de Coppola y alguna tipo Los Bingueros de Pajares y Esteso. Empieza la trama mafiosa hace más de 30 años, y cuando algo así lleva funcionando tanto tiempo acaba sabiéndolo todo el mundo, menos los defraudados, menos nosotros los ciudadanos. Ha sido protegido por toda la casta política, por la catalana, por el gobierno de Felipe González, por el gobierno de Aznar, por el gobierno de Zapatero y también, y aunque parezca lo contrario, por el gobierno de Rajoy.

La tomadura de pelo de la política española en general, y de la catalana en particular, nos lleva ahora a una nueva fase: la de la petición de una comparecencia en el parlamento catalán. Esto es como si un asesino etarra tuviera que ir a dar explicaciones a la sede de Bildu. ¿Que explicaciones le va a pedir el parlamento catalán a un personaje del que todos saben perfectamente su historia? Y no sólo la saben, la han ocultado y estoy seguro que también la inmensa mayoría ha sido partícipe de ella. Claro, los españoles, que debemos ser imbéciles ya nos quedamos tan tranquilos. No se preocupen, ya le pregunto yo, que no sólo he estado años protegiéndole si no que también he estado años robándoles como él. Tenía que aprovechar la guardia civil esa comparecencia para llevarles a todos a la cárcel, que aprovechen ese momento que les pillan a todos juntos, a ver cuantos quedan libres. Mi apuesta es entre cero y diez como mucho. 

Pero en esta rocambolesca historia no podía faltar Montoro. Montoro es una persona incapaz de estar más de una semana seguida sin amenazar a alguien o de ejercer de lo que es, un chulo de playa. Dice Montoro, el fantasma, que conocía la fortuna de Pujol desde 2000, ¡desde 2000! ¡Hace 14 años! ¿Y que has estado haciendo todo este tiempo Cristobal? Claro, era más importante perseguir al autónomo que no declara el IVA de 100€ que a este chorizo que hasta hace bien poco era considerado el líder del partido bisagra de la política española. Claro Cristobal, a este ni te interesaba, ni te atrevías a perseguirle, no tienes lo que hay que tener. 

¿Y por qué ahora si? Porque como sois incapaces, y unos cobardes, para luchar contra el proceso separatista con la ley en la mano, con la constitución, utilizáis todo el asunto de Pujol. Sois cómplices de un delito queridos gobiernos de España de los últimos 30 años, bueno de uno como mínimo, deberíais estar todos en la cárcel en lugar de estar legislando para meter allí a quien a vosotros os interese. No tenéis vergüenza.

Por otro lado está el ex fiscal Jimenez Villarejo que ahora ha asesorado a Podemos para presentar una demanda contra Pujol, lo de este tipo tampoco tiene nombre. Ha reconocido hace unos días, el tío de Trinidad Jimenez, que el propio Felipe González le obligó, mientras ejercía las funciones de Fiscal General del Estado, a parar sus investigaciones contra Jordi Pujol y a dar carpetazo al asunto. Jimenez Villarejo no sólo acusa a Felipe González de cometer un delito si no que también lo hace contra si mismo, se auto-acusa de haber prevaricado. Y se queda tan ancho, estará pensando ahora que que bien lo ha hecho cuando es otro delincuente, y reconociéndolo él mismo.

Lo dicho, el caso Pujol es una película. Pero es que, además, es una película con una final que casi todos nos imaginamos. Pasará el tiempo, todos nos iremos olvidando del asunto, los Pujol no devolverán ni un duro y, encima, ni olerán la cárcel. Si no, al tiempo.