Indignados, perroflautas y demás rebaños lanares

Menuda noticia la de hoy, que gran sorpresa, los indignados de toda España son convocados para rodear las sedes del PP de toda España como protesta por la crisis económica, los recortes y los casos de corrupción su "original" hastag, o como se diga, de twitter es: #BarbacoaDestituyente.
Ya había pasado mucho tiempo desde la última, ¿Dos o tres meses?, no lo tengo claro pero esta especie de brazo armado de la izquierda española se vuelve a revolucionar, entre canuto y canuto, a rodear sedes del PP. 
No sé muy bien que recibirán a cambio de sus amos, los grandes partidos de izquierda, serán canutos a precio de costo, quizás vales para comprar litronas en DIA o a lo mejor un cargamento de chanclas nuevas recién traídas del mercadillo. Pero desde luego lo que no se es a que parte de la sociedad española creen representar.
Los indignados de verdad no claman sólo contra un partido si no contra todos, sea el PP, IU, PSOE, UPyD, sea el que sea. Esta gente sólo protesta ante las sedes del PP, los casos de corrupción de sus amos les traen sin cuidado, lo que haga el PSOE e IU está bien hecho, está claro que son los que mandan.
Es evidente que la manipulación de este sector, iba a decir de la sociedad pero son más bien de la suciedad, es sencilla, no deben tener muchas cosas que hacer y tampoco muchas ganas de hacerlas porque hay mucha gente que no tiene tiempo para dedicar todo el día a rodear sedes y a pegarse con la policía.
Cuando no destrozan contenedores o el mobiliario urbano de la zona que rodean se sientan, megáfono en mano, para charlar en interminables asambleas, la asamblea de la asamblea y vuelta a asamblear, para, al final decidir que los puntos a discutir en las asambleas serán decididos en otra asamblea distinta pero que será después de fumarse unos, bien merecidos, porros.
Yo no tendría nada en contra de esta gente si se dedicaran a lo suyo, como hacemos todos los demás con nuestras cosas. Pero ellos que siempre se encuentran al márgen de todo, y se enorgullecen de ello, ahora deciden que van a luchar por el resto de los ciudadanos que, por cierto, les importamos un pito.
Queridos indignados, el día que decidan hablar coherentemente a lo mejor les escucho, pero mientras sigan divagando y ocupando su tiempo en marchas partidistas, sectarias y claramente teledirigidas lo mejor será que cada uno vayamos por nuestro lado, yo por mi camino y ustedes por el que les marca el pastor de su rebaño.