Los monárquicos, los republicanos y los imbéciles

No soy yo una persona monárquica, no me gusta demasiado la familia Real Española, su imagen dista mucho de ser la apropiada para representar a nuestro país. Son demasiados los escándalos que les salpican en los últimos tiempos y todo esto ha provocado que su imagen pública caiga en picado. Pero sin caerme bien no se si lo adecuado para nuestro país, dada la casta política que tenemos, sería una República. 

La idea de República que existe en España es la de un gobierno de izquierdas, los republicanos convencidos se auto-identifican con esta ideología. Obviamente éste es un error generalizado en nuestro país puesto que de todos es conocido que una República puede ser gobernada tanto por la derecha como por la izquierda. 

En los últimos tiempos no sólo los escándalos de la familia Real han sido motivo de discordia, también lo han sido las continuas operaciones del Rey y su ya bastante delicado estado de salud. El confundir la velocidad con el tocino es bastante habitual en España y eso está ocurriendo estos días con la operación de cadera del Rey. Una cosa es que sus escándalos sean injustificables y criticados y otra cosa es aprovechar una operación quirúrgica para hacer manifestaciones pidiendo su abdicación y la constitución de un estado republicano. Como siempre volvemos a la eterna superioridad moral de la izquierda.

Estas manifestaciones promovidas principalmente por partidos de izquierda y antisistema no tienen justificación alguna. No pueden criticar la supuesta ilegitimidad de una familia para ostentar la Jefatura del Estado, criticando que sea de carácter hereditario, y a la vez autolegitimarse ellos para decidir qué tipo de estado nos interesa a todos los españoles. A mí, personalmente, no me ha llamado ninguno de esos perroflautas para preguntarme nada al respecto.

Todos tenemos derecho a criticar cualquier asunto de nuestro país, pero nos representamos a nosotros mismos mientras nuestras propuestas no sean secundadas por la mayoría de los españoles. Que no se piensen que por hacer ese tipo de movilizaciones estúpidas, que siempre acaban igual, representan a nadie. No sé por qué la izquierda y los antisistema piensan que tienen legitimidad siempre para hacer lo que a ellos les de la gana. La poca o mucha razón que tengan la pierden siempre con sus actos, es lo que tiene la izquierda sólo se dan ellos la razón a ellos mismos.