Si hay algo bueno, muy bueno que tienen las redes sociales, y sobre todo Twitter, es la relación directa con personajes públicos en general, famosos y políticos. Antes, cuando no existía esa relación, ellos soltaban en periódicos, televisiones o radios su perorata y cada uno de nosotros teníamos que asistir impasibles a sus tonterías sin poder decir nada. Ante una mentira o una manipulación absurda nos comíamos hasta los dedos ante la imposibilidad de decirle me estás mintiendo. Y hablo de personajes públicos, no de personas anónimas, que aunque con distintas opiniones tienen el mismo derecho a opinar que cualquiera, siempre que haya respeto.
¿Y por qué de personajes públicos y políticos? Porque ellos tienen la oportunidad de soltarnos sus discursos en miles de horas de radio y televisión o miles de páginas de periódicos, muchos de ellos afines, sin que nadie tenga la oportunidad de poder decir esta boca es mía. Ante la manipulación y la mentira hay que mostrarles la evidencia de sus mentiras con el fin, aunque sea casi imposible, que algún día les de por lo menos vergüenza hacerlo.
Hay cientos, miles de mensajes, que esta casta política española que sufrimos podría quedar en evidencia, mienten más en un sólo twit de los que una persona normal sería capaz de mentir en toda una vida. De esos intercambios de opiniones con más de un personaje público yo ya he tenido alguna respuesta que he contado en algún post de este blog. Parecen, cuando les ves por televisión, personas más preparadas de lo que en realidad están. En realidad, y bajo mi punto de vista, para lo único que están preparadas, y no todas, es para hablar en público o delante de una cámara y soltarnos su perorata memorizada.
Para ellos las redes sociales son un verdadero peligro porque es donde más muestras dan de su incompetencia verbal y política. El pásado día 13 de Septiembre, por ejemplo, publicaba el incompetente coordinador de Izquierda Unida, Cayo Lara, el siguiente twit:
Crece una deuda insostenible x la que pagamos 100 mill.€ día mientras se mantiene un fraude fiscal de 80.000 mill.€. pic.twitter.com/YJx6EepU22
— Cayo Lara (@cayo_lara) septiembre 13, 2014
Parece un comentario sin importancia, pero no lo es, que el líder del partido sostenedor del partido responsable de los ERE de Andalucía diga esto tiene, como mínimo, su guasa. Pero hay más, con sedes de Izquierda Unida embargadas por Hacienda y en un partido, además, garante del endeudamiento y de lo público es, como mínimo, de nota. Esto lo podría publicar cualquier político cuyo partido no estuviera salpicado por corrupción alguna o con una idea económica distinta, o sea, prácticamente ninguno.
Hay que esconder la vergüenza, la timidez o el miedo, son mentirosos, tu les pagas, no les permitas que sigan mintiendo. Hay que dejarles en evidencia y atizarles donde más les duele que es en su mentira e incongruencia constante.
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