Valores

He decir antes de nada que creo firmemente que a la mayoría de las personas, excepto a algún enfermo, le ha impactado terriblemente la noticia del parricidio de Pontevedra. Lo que escribo hoy es una simple reflexión personal, es una sensación que puede ser errónea o no, pero que es la mía. 

Un perfecto medidor del impacto que pueda o no pueda tener una noticia son las tendencias de Twitter, es lo más comentado por la gente en un momento determinado y eso, en los tiempos que corren, es fundamental. En estos días se han producido muchas terribles noticias, para mi una de las más terribles ha sido el asesinato de dos pobres niñas a manos de su padre, lógicamente aquello fue tendencia en Twitter. Fue tendencia, pero no ocupó ni mucho menos la posición que ocupan asuntos tales como la caza de un león en África a manos de un cazador español, o el Toro de Vega u otras noticias similares; por supuesto no llegó ni a una décima parte del movimiento que hubo con el sacrificio de Excalibur.

A la evidente pérdida de valores que existe en nuestra sociedad hay que sumarle una evidente confusión en esos valores. Un animalista es capaz de llamar asesino a un torero, mientras por otro lado dice que el aborto es un derecho o pide la excarcelación de un asesino etarra porque vea ciertos motivos que podrían justificar sus asesinatos. 

No entiendo como una vida puede ser defendida en función a unas condiciones determinadas o dar más importancia al sacrificio de un perro, un león o un toro, que al asesinato de dos niñas, o a las barbaridades cometidas por el asesino abortista Morin, cuyo negocio era practicar abortos con bebés de ocho meses de gestación. 

De todo hay en el mundo, eso es evidente, pero la tendencia es esa, bajo mi punto de vista, después podrá venir a poner comentarios a este blog un animalista que me insulte por estar en contra del aborto, pero lo que tienen esos fulanos es una paja mental como para hacérsela ver. Yo defiendo la vida, sea la que sea, pero con unas prioridades; mi prioridad es siempre el ser humano desde el primer día de gestación, sufro por la muerte de un perro, pero no sufro de la misma forma que cuando leo que en España se practican más de 100.000 abortos anuales, ¡100.000! ¿Alguien se ha parado a pensar en eso? ¿Alguien sabía que PSOE y PP acordaron en 2013 proteger fetos de algunos mamíferos mientras por otro lado, el PSOE sobre todo, apoya el aborto de fetos humanos sin ningún tipo de pudor?

A ejemplos como esos me refiero cuando hablo de valores, estamos rodeados de autómatas que piensan en función a quien defienda ese pensamiento y que no se molestan en tener la suficiente independencia para tener sus propias opiniones. Después esos que defienden la eliminación del Toro de Vega o que protestaron por la muerte del perro Excalibur insultan a los que estamos en contra del aborto o como poco lo justifican diciendo que no es comparable.

Un padre ha matado a sus dos niñas pequeñas con una radial y para muchísima gente eso no merecía ningún comentario, eso si, el sacrificio del perro Excalibur abandonado en casa por sus propios dueños mereció no sólo más comentarios, mereció incluso movilizaciones. Y ahora que vengan los buenistas a justificarse o a insultarme que, la verdad, me la trae al pairo.