Los políticos españoles son de tercera, recrisis

Para los que somos de provincias y autónomos la temperatura económica del país la tomamos de nuestras amistades en las grandes capitales. Tengo un gran amigo en Madrid, propietario de una pequeña empresa que me mantiene informado de la tendencia económica por la que él atraviesa, que será la mía al cabo de poco tiempo. Cuando hablábamos antes de las elecciones del 20 de Diciembre me decía que en Madrid notaban una mejoría evidente. No echaba las campanas al vuelo, pero su frase habitual era que parecía que la "cosa" se empezaba a mover.

Ayer mismo, dos meses después de las elecciones, le pregunté de nuevo y me decía que desde el día veinte se había vuelto a paralizar todo y que habían empezado a ir otra vez para atrás como el cangrejo. Me ponía ejemplos de otros negocios, el de un bar, el de una empresa de transportes...y me decía que a todos les estaba pasando lo mismo ahora y que habían notado, también, esa mejoría de antes del día 20 de Diciembre.

Llevamos casi dos meses con un gobierno en funciones y a la espera de algo peor, un posible pacto entre PSOE y Podemos. Yo no se de qué manera afecta esto a las empresas del IBEX, ni a la bolsa, ni a la macroeconomía, pero si se como afecta al autónomo, al ciudadano de a pie y a las micro economías, la respuesta es de pena. A esta gente que está negociando para gobernar sólo les importa qué puesto ocupará cada uno en un futuro, el de él y el de los suyos. 

Mientras tanto se discute de como evitar el fraude fiscal del fontanero que hace una factura en "B" para ganar algo de dinero y poder al menos pagar el impuesto revolucionario que es la cotización del mes a la seguridad social. Estos políticos de pacotilla no están anclados en una discusión de principios políticos, ideológicos o económicos, están anclados en una discusión de egoísmo puro y duro. Y mientras tanto, ¿qué más da si las administraciones vuelven a pagar cuando quieren al autónomo? Que lo sufra él en su casa, pero que no se le pase ni un día el pago de sus seguros sociales, que le crujirán por todos los lados.