A los chivatos los conocemos todos
En la Audiencia Nacional aparte de juicios todos sabemos que se representan también obras teatrales, pero no buenas obras teatrales, unas obras bastante malas. Cuando el cartel nos anuncia el título de la obra, sus protagonistas y quien las dirige casi todos sabemos cual va a ser el desenlace final, no son precisamente obras de Alfred Hitchcock en las que sólo conocemos quien es el asesino en el último acto, aquí ya se conoce desde el principio.
En la última obra, la del "Caso Faisán", ya sólo viendo a los intérpretes nos damos cuenta que no hay ningún actor protagonista, sólo actores secundarios y ya sabemos desde un principio que la obra no va a valer lo que nos ha costado su entrada.
Nos cuentan en su argumento que dos policías, Pamiés y Ballesteros, son responsables de haber avisado a los miembros del aparato recaudatorio de ETA que iban a ser detenidos en el bar Faisán. Dos curritos con unas responsabilidades muy limitadas son los encargados de tirar abajo toda una investigación policial. Nos argumentan que dado que el Congreso de los Diputados había decidido poner en marcha el asqueroso y mal llamado proceso de paz, estos dos policias, que no se encomendaron ni a Dios ni al diablo, deciden por su cuenta y riesgo evitar esas detenciones para no poner trabas a ese proceso.
Tanto en la vida real como en la ficción cuando ves un argumento de este tipo lo primero que piensas es que te están tomando el pelo. En este caso, además, de la forma más descarada que pueden, es imposible hacerlo con un descaro mayor. Todos sabemos todos, pero absolutamente todos, que en el banquillo no se han sentado los culpables del chivatazo a ETA, se han sentado dos cabezas de turco. Todos sabemos que esta es una más de las muchísimas mentiras de este chusco estado de derecho, inexistente a todas luces.
La casta política, la judicial e incluso la periodística, salvo honrosas excepciones, sabemos lo que va a decir, sabemos cual va a ser su opinión. Desde que se cometió este asqueroso chivatazo ETA asesinó a las siguientes personas:
30-12-2006 | Diego Armando Estacio | MADRID | |
30-12-2006 | Carlos Alonso Palate | MADRID | |
01/12/2007 | RAÚL CENTENO | GUARDIA CIVIL | CAPBRETON (FRANCIA) |
01/12/2007 | FERNANDO TRAPERO | GUARDIA CIVIL | CAPBRETON (FRANCIA) |
07/03/2008 | MIGUEL ISAÍAS CARRASCO | POLITICO | ARRASATE-MONDRAGÓN (GUIPÚZCOA) |
14/05/2008 | Juan Manuel Piñuel Villalón | GUARDIA CIVIL | Legutiano (Álava) |
21/09/2008 | Luis Conde De La Cruz | Militar | Santoña (Cantabria) |
03/12/2008 | Ignacio Uría Mendizábal | Empresario | Azpeitia (Guipúzcoa) |
19/06/2009 | Eduardo Puelles García | POLICÍA NACIONAL | Arrigorriaga (Vizcaya) |
30/07/2009 | Carlos Sáenz De Tejada | Guardia Civil | Calviá |
30/07/2009 | Diego Salvá Lezaun | Guardia Civil | Calviá |
16/03/2010 | Jean Serge Nérin | Policía Francés | Dammarie-Les-Lys (Francia) |
Un Estado de Derecho, en lo que al terrorismo se refiere, debería defender al ciudadano del peligro del terrorismo y honrar la memoria de quienes fueron asesinados a manos de esta gentuza.
Queda en la conciencia de la justicia y de la casta política la duda de cuantas de estas muertes se podrían haber evitado si no se hubiera cometido la traición tan inmensa que representa el caso Faisán. Digo conciencia, algo de lo que toda esta gente carece. Parece que lo único que remueve la conciencia de toda esta casta es el saber cuanto tiempo pueden permanecer en su sillón o a que sillón superior pueden aspirar, vergonzoso.
Que no nos cuenten milongas, que no nos hagan creer que investigan, no hace falta darle muchas vueltas al asunto, la traición del caso Faisán tiene una responsabilidad política. El problema es que nadie les quiere señalar con el dedo, nadie les quiere juzgar. A los cerebros de esta traición, a los verdaderos culpables los conocemos todos y campan a sus anchas como si nada hubiera pasado.
¡Vergüenza debería darles!
Llevas toda la razón. A los chivatos los conocemos todos porque siempre son los mismos, independientemente del lado político al que pertenezcan. Al fin y al cabo, todos son iguales, el mismo perro con distinto collar. Muy buen trabajo.
ResponderEliminarDepuntovista.blogspot.com.es
Muchas gracias Daniel, entre todos se esconden sus trapos sucios.
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