El desmemoriado lo que quería era vender.

El señor ex presidente del Gobierno de España, José Luis Rodríguez Zapatero, ha demostrado siempre que es un auténtico experto en meter la pata y en pasarse las cosas por el forro. Le dio igual la crisis, le dio igual negociar con ETA, le dio igual enemistarnos con nuestros aliados, le dio igual poner España patas arriba con la revisión de los estatutos de autonomía, le dio igual hacer leyes educativas para manipular, le dio igual...le dio igual todo. Lo que más le ha importado siempre a este soplagaitas era él mismo y sus circunstancias.

Después de su exitazo como presidente del gobierno, como no iba a ser menos que nadie, decidió que además nos lo iba a contar por escrito todo publicando un libro de memorias. Esas memorias yo, por supuesto, no las he leído ni me las voy a leer, sólo faltaría. La editorial que le ha publicado las memorias debió suponer también que mucho éxito no iba a tener con los antecedentes del individuo y con su ínfima y desastrosa imagen. Tenían que poner un gancho para que el libro se vendiera y ¿que mejor gancho que la carta que le envío el BCE a mediados de 2011?

Ni cortos ni perezosos, tanto editorial como Zapatero decidieron incluir la carta en el libro de memorias del ínclito inepto. Pero he aquí el problema, la carta es confidencial y va dirigida al Presidente del Gobierno de España y no a José Luis Rodriguez Zapatero. Zapatero no ha pedido permiso ni al BCE ni al gobierno para publicar esa carta.

Este asunto ha provocado malestar en el BCE que ha acordado junto con el actual gobierno del PP no confirmar ni desmentir la veracidad del documento.

Pero, ¿es capaz Zapatero de hacer algo que no sea en su propio interés? Me temo que no, el señor Zapatero sigue pecando de lo mismo de egoísta, de prepotente y de inútil. Pobre, que no se enfaden mucho con él, si el pobre lo que quería era vender libros, animalito.