Y va Susana y se lo cree.

Amortizado ya Rubalcaba, bueno amortizado porque el sujeto no da más de si, su oscuro historial político le está pasando factura cuando el final de su carrera está tan cerca, nada más. Pues bien, amortizado ya Rubalcaba anda el PSOE buscando nuevos líderes de donde no los tiene y como no los tiene no tiene más remedio que inventárselos. Por ahí anda Chacón, Madina, Pachi López y Susana Díaz.

Centrándonos en Susana Díaz, la presidenta de la Junta de Andalucía, esa que gobierna Andalucía con IU. La misma que lidera un gobierno que ahora mismo supera el 35% de paro, que sin tener dinero se dedica a subvencionar proyectos inexplicables en Africa y América Latina. La de los ERE, la de las subvenciones multimillonarias a los sindicatos. En fin la presidenta del desgobierno de Andalucía. Pues bien, llega Susana Díaz y es encumbrada por las bases del PSOE a un puesto de referencia dentro del partido. Ese puesto de referencia no es un puesto en si, pero si que es un simbólico puesto por el que todo lo que dice esta chica se considera verdad absoluta. 

A Susana ya se le está quedando pequeña Andalucía y necesita llevar su verdad y sus dogmas por todos los rincones de España dando charlas, mítines y conferencias. Da un discurso al PSC, se entrevista con Artur Mas, Susana no se ha visto en otra igual. La última de Susana, la última bobada quiero decir, ha sido la tan manida frase y eslogan de cambiar la constitución. Pero no lo ha dicho con el argumentario habitual de los socialistas, Susana ha ido más lejos. Ha dicho que la constitución hay que cambiarla porque hay muchos españoles que no la han refrendado por razones de edad ya que es del año 1978, vaya con Susana. Querida Susana, la Constitución de Estados Unidos fue aprobada en 1787 y dudo mucho que queden muchos americanos vivos de los que la aprobaron. Susana una constitución hay que cumplirla para ver si funciona o no funciona, si quieres saber si la nuestra funciona haz el favor de cumplirla alguna vez y después hablas.

El problema de Susana no es que sus compañeros de partido la hayan encumbrado sin haber hecho ni demostrado nada. Su problema es que ella se lo ha creído y si hay algo malo muy malo en esta vida es ser tonto de baba y creerte listo.