¿Por qué los hombres somos tan calzonazos?

Sucedió mientras estaba haciendo mi compra semanal en Mercadona. Si, lo reconozco, soy un poco cotilla, mientras estoy haciendo la compra me fijo en la gente, les escucho y me hago mis películas mentales sobre ellos, que le vamos a hacer, me lo paso bien. Volviendo al Mercadona, estaba una empleada de Mercadona colocando una estantería cuando se le acercó un hombre con dos niñas pequeñas, las niñas empezaron a llamarla mamá y hacerle cientos de preguntas: ¿a que hora vas a volver a casa? ¿Me vas a acostar tú? etc.... Suposición lógica: eran su marido y sus hijas. Mientras ella atendía a sus hijas subida en una pequeña escalera el marido por el otro lado no hacía más que preguntarle: ¿cojo harina?, ¿cojo harina?....Esta misma pregunta la repitió el hombre unas cinco o seis veces, la pobre mujer non daba abasto. Tal era su agobio que estuve a punto de contestarle yo al marido: si, coge harina, pesado. Total son 0,50€ y si tienes en casa así no compras durante un año.

Lo cierto que me vi reflejado en él porque era un puñetero calzonazos como lo era yo, yo ahora lo sigo siendo pero la verdad es que he bajado mucho mi nivel de calzonazos desde que me divorcié, antes era tan exageradamente calzonazos como ese hombre. ¿Por que sucede esto? ¿Por qué a los hombres, cuando nos casamos, nos cuesta tanto tomar decisiones por nosotros mismos? En mi caso, antes de casarme, yo compraba mi ropa y tomaba mis decisiones, pero cuando me casé me resultaba mucho más cómodo que las decisiones las tomaran por mi. Y me convertí en un calzonazos tan grande que habría sido capaz de no comprar el dichoso paquete de harina sin una autorización previa o sin que viniera reflejado en la lista de la compra que, por supuesto, no hacía yo.

Lo gracioso es que después toda esa panda de calzonazos, que somos la mayoría de los hombres de mediana edad, nos juntamos con los amigos y alardeamos de lo contrario. Que nadie se me moleste, habrá excepciones, pero esa será la excepción que confirme la regla.

El golpe definitivo para un hombre calzonazos es el divorcio, cuando te divorcias vuelves a tomar tus decisiones y cuesta un montón. La lista de la compra la tienes que volver a hacer tú, las camisas las tienes que volver a comprar tú y la organización de tu casa es tuya y sólo tuya, ya no puedes preguntarle a nadie, como mucho a tu madre. 

La verdad es que si lo piensas fríamente no se vive mal siendo un calzonazos, tus responsabilidades se limitan a tu trabajo y poco más. Las verdaderas decisiones, las difíciles, las de la casa y las de la familia nunca las tomas tú, ese tipo de decisiones desgastan mucho y son muy difíciles de tomar. Hasta en eso la naturaleza es sabia, yo creo que ese es el motivo por el que el hombre, normalmente, muere antes que su mujer. La mujer viuda es capaz de quedarse sola, pero un hombre, cuando se queda viudo, se queda más perdido y sólo que un pulpo en un garaje.