Izquierdistas, no piséis más informes
Llevamos ya un par de años dándole vueltas a la nueva ley de educación diseñada por el gobierno del Partido Popular, la LOMCE. Problemas, manifestaciones, sindicatos de estudiantes en desacuerdo, la izquierda levantada prácticamente en armas y frasecitas tan impactantes como "vuelta a la educación Franquista".
Entonces llega la izquierda y explica porqué está tan en desacuerdo con esa ley. Y ya no queda más remedio que reírse. La Religión, ese es el gran problema, la Religión. Ya, pero si la Religión es una asignatura optativa, el que no quiera estudiar Religión que no lo elija. No, como ese problema se soluciona poniendo la asignatura como optativa llega el siguiente problema. Ya, pero el problema es que si la eliges su nota compute. A la izquierda lo que le gusta es que los alumnos vayan a la escuela pero que no se evalúe su aprendizaje.
Cuando la izquierda habla de la Religión, de su manipulación y de, según ellos, su mentira, no se dan cuenta que la Religión forma parte de la Historia de España, pero además una parte fundamental de esa Historia. Muchos de los que tanto la critican estarán bautizados, habrán hecho la primera comunión, se habrán casado por la Iglesia y el día que se vean morir estoy completamente seguro que llamarán a un cura para ponerse en paz con Dios, aunque sólo sea por si acaso.
El verdadero problema que tiene la izquierda con la LOMCE es que, desde que empezó la democracia, su único afán ha sido la manipulación. Sus leyes educativas nos han llevado a la cola de todos los informes Pisa realizados, pero eso no importa, lo importante para la izquierda es la manipulación de nuestros hijos y la educación de nuevos seguidores, aborregados y cuanto más radicales mejor. Nuestro "queridísimo" y "añorado" presidente José Luis Rodriguez Zapatero fue, quizás, el más claro exponente de ese intento de adoctrinamiento a nuestros hijos. Ya sólo con el nombre de la asignatura que se inventó lo dejaba claro: "Educación para la ciudadanía". Si te cuentan que esa asignatura la imparten en las escuelas de la Cuba de Castro te lo crees.
Queridos progres, querida izquierda, queridos sindicatos de estudiantes treintañeros, se acabó la manipulación, se acabaron los borregos, se acabó el adoctrinamiento. Ahora toca la verdadera educación. Si queréis nuevos seguidores aborregados hacedlo con vuestros hijos, yo quiero que los míos estudien, se eduquen y elijan sus opciones políticas con libertad.
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