UGT, toma un millón, cámaras ¡Acción!

Parece que en UGT se está rodando una película, una de esas en la que una de esas escenas no salen bien y la tienen que repetir un montón de veces. Pero, lo peor de todo es que en el caso de la película UGT esa toma se repite un millón de veces y son tomas completamente distintas. Ya no sabemos si nos llegamos en la escena de las facturas falsas, ya no sabemos si nos llegamos en la toma de los ERE de Andalucía, no sabemos si nos llegamos en la toma de las mariscadas, ya no sabemos si estamos en la toma de las lujosas sedes recién inauguradas o en la de las fiestas de lujo en sus casetas de feria...ya no sabemos en que escena nos llegamos aunque todas pertenecen a la misma película, UGT.

Y resulta que en todas están implicados, los primeros actores, los ayudantes de cámara, los de sonido, los extras, pero el director de la película, el director de todo no se entera de nada, se entera de la película por la prensa. Deberían soplar vientos de cambio en esa película, los fallos son palpables y los productores, osea nosotros los ciudadanos, ya nos estamos cansando de lo costosísima que nos está resultando esta película, a la cual la vemos poco futuro en taquilla, con una recaudación bastante excasa.

Pero lo peor de todo es que el excesivamente bien valorado director de la película, Cándido Méndez, todavía no ha conseguido presentarnos a lo largo de su ya muy dilatada carrera una película en condiciones. Pero eso si, como crítico de las películas de otros directores es un crítico mordaz e incisivo en sus apreciaciones en las que, sin esperar siquiera a que el director de la misma ponga el rótulo de Fin el ya le está pidiendo responsabilidades sin saber ni siquiera cual va a ser su desenlace. El sólo pide la cabeza de los otros directores sin entender demasiado de cine.

Cándido, dedícate a tu película, todavía te quedan muchas escenas que rodar y muchos cortes que pegar a una cinta que pasa de ser largometraje a demasiadolargometraje, se te está yendo de las manos el presupuesto. Me da la sensación que el presupuesto se te va de las manos porque en lugar de gastarlo en hacer una buena película te lo estás gastando en hacer una simple pantomima.