El señor Mas, don Arturo, cual don Vitto Corleone en "El Padrino", está llegando a un punto sin retorno. Este engendro de político venido a más, educado a los pechos de su gran valedor político y profesor de mafiosos, don Jordi, está perdiendo el norte por completo. No nos levantamos ningún día sin encontrarnos en la prensa con alguna amenaza suya, no reivindicación, amenazas en el sentido más estricto de la palabra.
Está crecidito el amigo y no se da cuenta que sus queridos colegas separatistas han elegido al más tonto para que sea a él al que le partan la cara. Con esa voz que parece salida de cualquier voz en off de película de serie B, con esa pinta que lleva de trajes de oportunidades y de fuera de temporada y con ese peinado en el que el flequillo parece más bien el rabo de una rata callejera ya que se encuentra sin ninguna compañía justo encima de su gran frente. Pues bien, el señor Mas se pasa el día lanzando pullitas y amenazas como si fuera un matón de barrio.
En sus últimas declaraciones, el chulito, ha dicho que en este año se cumple el 75 aniversario del fin de la guerra civil española y que se deberían tener presentes las consecuencias negativas que la misma tuvo para España. Pero Arturo, ¿tu de que vas?, ¿no crees que ya te estás pasando de frenada amiguito? Arturo evidencia una serie de problemas mentales que son en parte culpa suya y de sus amigotes separatistas y en parte culpa del gobierno español.
El problema personal es que se cree más de lo que es, es el típico atontado que por circunstancias de la vida ha subido y no por méritos propios. Sus amigotes no hacen nada para que mejore su estado mental y le dan palmaditas en la espalda, con lo que el cerebro de Arturo convierte sus tonterías en frases dignas de un gran estadista. El gobierno español, cobarde como pocos, todavía no ha dado un puñetazo encima de la mesa para parar los pies a este iluminado. Hasta al ciudadano más separatista de Cataluña tiene que darle vergüenza ajena las bobadas de Arturo.
Querido Arturo, como ciudadano español y directamente afectado por tus amenazas te diré que ya me tienes harto. Que eres un pesado, que eres un tonto a las tres y que ya vale de tocar las narices. Arturo habla con el gobierno central de lo que quieras pero deja de insultarnos y de amenazarnos. Es una pena tener un gobierno cobarde como el que tenemos, los chulitos de barrio, los que amenazan, tienen un defecto común, en el fondo suelen ser unos cobardes y sólo amenazan cuando otros les ríen las gracias y cuando se encuentran acompañados. Arturo, en el fondo no eres nadie, tómate la medicación, relájate y vuelve a casa con tu mujer, la checa independentista catalana. Arturo deja de amenazarnos, deja de insultarnos y déjanos en paz, ya nos tienes hartos.
Este tipo a mi también me tiene harto, pero Javier no te engañes no deja de ser otro tipo mas que quiere seguir al estado caciquil.
ResponderEliminarComo ya sabemos estos no han aparecido en el escenario político hace unos días, llevan siglos haciendo lo mismo.
Al decir que hacen lo mismo me refiero a trincar, para ellos el estado no es otra cosa que una manera de robar, lo mismo que hace el nacionalismo español pero contado en catalán, solo es cuestión “parlar catalán” nada mas, por lo demás no hay diferencia. No nos olvidemos que iban cogidos de la mano con el gobierno español fuese cual fuese su color, eso si mientras había dinero en caja y se le daba algo. Ahora que se acabo quieren hacerlo por las manos. Pero llamemos a las cosas por su nombre, ellos al igual que el nacionalismo español le da igual su patria y su bandera. Por no hablar de sus ciudadanos, que casualmente sufren lo mismo que los españoles, pero que usan las mismas políticas de austericidio que las de aquí.
La verdad, ya da asco.
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