Lo normal es que cuando recibimos noticias del norte de Europa todas sean positivas, envidiables, perfectas, todas ellas dignas de unos países que son la envidia de todos y que funcionan a la perfección. Fíjate los daneses que maravilla, o los suecos, o los noruegos, menuda educación. A pesar que todas esas noticias son en general fantásticas a mi esos países, en general, nunca me han dado demasiada envidia. Creo que ganan mucho, que todos tienen trabajo, que tienen unos sistemas sanitarios y educativos fantásticos pero les falta algo muy importante, les falta ver el sol. Todo eso les convierte, bajo mi punto de vista, en una gente con una tara importante y todo eso se demuestra cuando salen de allí de vacaciones, si muy educados y muy ricos pero son la tristeza con patas.
En estos días se ha aprobado en Bélgica una ley que, para mi, es terrible, se ha aprobada la eutanasia infantil sin límite de edad. Esto es los médicos pedirían autorización a los padres para poder hablar con sus hijos y pedirles su autorización para practicarles la eutanasia, aunque sea en casos extremos. La frialdad con la que esta Europa, tan progresista y tan moderna ella , empieza a tratar los asuntos relacionados con la muerte dan miedo. ¿Donde está el límite? ¿A partir de qué momento el sufrimiento de una persona es lo más importante? ¿No será más importante el gasto sanitario para el erario público que el tratamiento de su enfermedad conlleva? No nos equivoquemos, cuando cualquier estado plantea asuntos como este hay que pensar mal. Yo pienso mal y pienso que no se quieren gastar un duro más, en este caso no se querrían gastar más dinero en el tratamiento de mi hijo.
Tiene que ser terrible para un padre ver sufrir a un hijo por una enfermedad, pero tiene que ser más terrible todavía que los médicos, en quien confías, te digan que si no sería mejor que se le dejara morir para evitar su sufrimiento. La vida es lucha y sufrimiento, la vida es eso, la muerte forma parte de la vida pero estamos llegando a un punto de permisividad de la cultura de la muerte que aterra. Ahora nos dicen que serían las familias las que dirían cuando se puede acabar con la vida de un familiar que sufre pero este para mi es sólo un primer paso. El siguiente será otro, el siguiente será el estado el que decida sobre la vida o muerte de un enfermo ya sea niño, adulto o anciano. La cultura de la muerte, en definitiva, no es más que un nuevo paso en la victoria de la cultura del dinero, es sólo economía al fin y al cabo.
Otro gran artículo, mi enhorabuena.
ResponderEliminarEsto de la eutanasia es algo que da para mucho debate y que abre muchas puertas a otras ideas. Aunque lo de la eutanasia para mi está bien, pero se debe de legislar un poco… como todo.
Si algún día yo estuviera en situación de coma o parapléjico prefiero que me eliminen. Ya no por mí y mi sufrimiento, más bien por los demás que estarán a mi lado, y que de una manera u otra pierden parte de su vida y solo ganan sufrimiento.
Muchas gracias, el problema es eliminar por eliminar, el problema es que acabrá siendo el estado quien decida sobre nuestras vidas.
ResponderEliminarNo lo veo asi,hablando de la eutanasia en general.Lo que hace el Estado es dejarte libertad para que tu elijas sobre tu propia vida en situaciones extremas,protegiendo legalmente a quien lleva a cabo tu decisión. Es decir, el Estado no decide si vives o mueres, ni cuando. Solo te ofrece la herramienta para acabar con tu vida en situaciones límite se sufrimiento insoportable e in necesario. Si por el contrario decides afrontar la situación, también te ofrece las herramientas para llegar al final con el menos sufrimiento posible.
EliminarBuen artículo, y plenamente de acuerdo. Te dejo enlace a un artículo que he publicado sobre lo mismo. Un cordial saludo.
ResponderEliminarhttp://sinalzarlavoz.blogspot.com.es/2014/02/en-una-pendiente-deslizante.html
Muchas gracias Nacho, voy ya mismo a leerlo.
Eliminar