Los cuatro días que hundieron España.
Siempre que veo a alguien a quien le sucede una desgracia terrible me surge la misma pregunta, ¿cómo habría reaccionado yo? Hay gente que pierde a hijos, esposas, padres, madres o hermanos de una forma terrible y cuando los veo, aparte de esa pregunta, genero hacia ellos una gran empatía, un poco ponerme en su lugar. Creo que cualquier ser humano, que se precie de serlo, siente prácticamente lo mismo que siento yo.
Hay ciertas profesiones en las que parece que todos esos sentimientos, que son innatos al ser humano, desaparecen por completo, una de esas profesiones es la de político, político español para más señas. Se va a cumplir el décimo aniversario de los atentados del 11 de Marzo de 2004, y del posterior beneficio que obtuvo Zapatero en las elecciones del 14 de Marzo, y a las únicas conclusiones que hemos llegado después de todo este tiempo son estas:
1.- Los terroristas consiguieron su objetivo con creces, dar un golpe de estado en toda regla, colocar en la presidencia del gobierno a quien ellos querían (Zapatero) y hundir España.
2.- Ningún político, en activo, tiene ni el valor, ni la honradez, ni la caridad hacia las familias afectadas de buscar a los verdaderos culpables de aquella salvajada.
Los atentados se convirtieron, para no variar, en un arma arrojadiza perversa que utilizó con tino el repugnante PSOE contra el partido que gobernaba en aquel momento España, el PP, y especialmente contra el presidente del gobierno Jose María Aznar. Esas fueron las consecuencias inmediatas de esos atentados, las no tan inmediatas las seguimos pagando diez años después, y lo que queda.
Es curioso que después de la victoria electoral de Zapatero haya habido una especie de pacto tácito entre todas las fuerzas políticas, incluido el PP, para hablar lo menos posible de este asunto y para dar por buenas las conclusiones tan curiosas que se sacaron del posterior juicio. Si nos paramos a pensar sólo un poco hasta el juez encargado de dictar sentencia en aquel juicio cambió su inclinación política a partir de entonces, era un juez conservador y ahora es un juez que parece que nació socialista. Sólo este dato debería ser suficientemente elocuente de lo que hemos pasado desde entonces.
Desde el primer momento del atentado todos pensamos en ETA, pero a partir de la primera semana posterior a los atentado todos los responsables políticos se han obsesionado con intentar quitarnos esta idea de la cabeza. Para mi ETA sigue siendo uno de los principales sospechosos, aunque no solos, en compañía de otros. Es importante recordar que el 1 de Marzo de 2004, la Guardia detuvo a dos furgonetas en Cañaveras (Cuenca). Las furgonetas iban conducidas por etarras y una de ellas llevaba 500 kgs. de explosivos, era una furgoneta bomba y se dirigía hacia Madrid, repito 1 de Marzo de 2004. A partir de esta noticia las sospechas hacia ETA son más que justificadas, aparte del ya conocido historial de estos sinvergüenzas.
Yo, personalmente, no me creo nada de la versión oficial de los atentados, es más, estoy convencido que es una sarta de mentiras burdas y asquerosas. Es indignante, además, el trato que los que no estamos de acuerdo con la versión oficial recibimos por parte, sobre todo, del ala izquierda de este país. Desde entonces los etarras son hombres de paz y los que no nos tragamos las mentiras que nos venden ni jueces ni políticos somos tachados de locos y, prácticamente, de sinvergüenzas. Me da igual lo que digan de mi, yo no me creo nada, que quede claro.
Después están las pobres familias afectadas por la pérdida de alguno de sus familiares. Se les da una palmadita en la espalda todos los días 11 de Marzo desde hace diez años y con la misma educación una patadita en el culo, suave pero patadita, y para casa. Allí se quedan solos a llorar sus penas y hasta el año que viene, que les hacen menos caso todavía.
¿Y que pasa en España diez años después? Pues que de aquellos barros vienen estos lodos. Hemos tenido que aguantar de presidente del gobierno durante ocho años al político más indecente que jamás gobernará este país, Jose Luis Roidriguez Zapatero, presidente por atentado. Tenemos una crisis económica terrible, acompañada de una crisis política no menos grave y, sobre todo, una impresionante crisis de valores. Tenemos en las instituciones a terroristas, a independentistas, a traidores, a comunistas pro dictaduras bolivarianas...A los políticos no les hace falta estudiar para ser ministros y a los politicuchos, que antes no habrían llegado ni a concejales de su pueblo, ahora les tenemos con su culo bien repanchingado en el congreso de los diputados, en fin, una auténtica basura.
Hay gente que discute la fecha exacta del comienzo de esta crisis, unos dicen en 2008, otros dicen en 2007, yo digo que comenzó el 11 de Marzo de 2004 y el día 14 de Marzo de 2004 se certificó definitivamente. Yo no olvido, no perdono y no me creo la versión oficial. Murieron casi 200 personas y hubo otras casi 2000 heridas, hay 47.000.000 de personas afectadas por sus consecuencias y un sólo beneficiado, Jose Luis Rodríguez Zapatero.
Uuufff... qué gran verdad !!!!
ResponderEliminarLo has explicado perfectamente y con la prudencia que obliga el hecho de no tener pruebas (excepto las furgonetas llenas de explosivos y conducidas por etarras).
ResponderEliminarPienso exactamente lo mismo, así como mucha gente.
Todavía me acuerdo la cara de sorpresa que puso el inepto ZP al asomarse al balcón de la sede del P$O€ cuando "el atentado golpe de Estado" lo puso en el poder.