No se denota en la calle un especial interés por las elecciones europeas, o al menos eso es lo que a mi me parece. La gente está bastante harta de la política, y sobre todo decepcionada, y el ambiente ante esas elecciones parece más bien de pasotismo. Como ocurre últimamente cada vez que hay elecciones las pre-campañas electorales se adelantan bastante a las campañas y a las posteriores elecciones. El PSOE lleva ya en campaña varias semanas y el PP también, pero hay una pequeña diferencia, el PSOE tiene candidato y el PP todavía no.
La candidata del PSOE, Elena Valenciano, hace ya unos cuantos días que ha comenzado con sus mítines, centrados sobre todo en la pobreza, en la derecha y en el asunto del aborto. No estoy de acuerdo con nada de lo que dice, pero ahí está dando la tabarra en busca del voto. Ahora el PP le está dando un argumento más en esta campaña electoral, su falta de candidato. Que si nadie quiere dar la cara por Rajoy, que si quien va a querer defender los recortes sociales, que si cómo van a defender la ley que sitúa los derechos de la mujer como hace 100 años....Si, demagogia pura, nada nuevo bajo el sol, pero ahí están los socialistas con candidata, fácilmente mejorable, pero candidata al fin y al cabo.
Ante las preguntas de la prensa el señor Rajoy ha dicho que todavía no es el momento de presentar a su candidato, pero que lo hará en breve. Eso es lógico, si tenemos en cuenta que las elecciones son el 25 de Mayo y el plazo para presentar candidatos finaliza el 7 de Abril, en breve tiene que ser. Yo creo que Rajoy está vendiendo sus dudas sobre el candidato ideal como un manejo de los tiempos, pero no son manejo de tiempos, son simples dudas.
Los líderes políticos, y cuanto más mediocres son más les gusta lo de "manejar los tiempos", parece que buscan que se hable de ellos en plan místico. Lo de "maneja muy bien los tiempos" parece que les da una especie de halo divino, que les hace parecer seres que no son de este mundo, que están por encima del bien y del mal, y que provoca entre sus más fieles seguidores una especie de admiración que raya con la admiración por lo divino. Hasta de Zapatero se decía que manejaba muy bien los tiempos, en él está claro que era por decir algo porque era un patán en todo lo que hacía.
Pues a mi modo de ver ni manejar tiempos ni gaitas. Rajoy tiene dudas y no sabe bien a quien poner de candidato. El ser candidato a unas elecciones europeas puede ser considerado o como un gran premio o como un gran castigo. Si es alguien que puede hacer sombra al líder y resulta molesto se le manda a Europa para que deje de molestar, así la patada en el trasero es menos sonora y, sobre todo, está muy bien pagada. Si es alguien, cansado de la política nacional y bien visto por el partido, la opción europea es un premio por los servicios prestados. El retraso en el candidato de Rajoy, a mi modo de ver, no vienen entonces por el manejo de los tiempos. Sus dudas se basan, más bien, entre la patada voladora o la palmadita en el hombro.
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