Venga, fiscalízame más.

Acabo de leer una noticia que no por mucho que la lea deja de enojarme y de ponerme de mal humor: "Los españoles pagan un 22% más de impuestos directos que la OCDE". O lo que es lo mismo, nos tiene abrasados. Los que iban a venir a rescatarnos de la barbaridad de impuestos que pagábamos no sólo están haciendo lo mismo que sus antecesores, aún peor, todavía están subiendo más los impuestos. Cuando estaban en la oposición todo eso era malo, las subidas de IVA, las subidas generalizadas de impuestos, las subidas de los servicios energéticos...malísimo, pero resulta que ellos todavía lo están recrudeciendo más, pero debemos estar tranquilos, es por nosotros, es por nuestro bien, las consecuencias del "estado de bienestar".

"Estado de bienestar", pero, ¿todavía hay alguien que se crea semejante patraña? ¿Como va a ser bueno para el estado de bienestar que el dinero no lo maneje el interesado si no el propio estado? Ahora estamos en plena campaña de declaración de la renta y, a pesar de los numerosos escándalos políticos con robos de cantidades milmillonarias. A pesar del evidente gasto desorbitado del estado, con escaso o nulo control, que no se ha reducido ni un ápice desde el comienzo de la crisis, a pesar de todo eso, ahora nos sacan otro gran problema, que por supuesto y como siempre también es culpa nuestra, es culpa de los ciudadanos. Resulta que el gran problema de España es la economía sumergida.

Cuando hablan de economía sumergida, ¿a cual se refieren? ¿A esa que ha surgido a raíz de la crisis que padecemos? A que economía sumergida se refieren, ¿a esa que está consiguiendo que muchas familias consigan sobrevivir a todo esto? ¿A esa que está consiguiendo mantener una cierta estabilidad social que, de no existir, este país sería un desastre? No podemos más, no podemos seguir aguantando este ritmo impositivo y ver como la casta política no baja ni un ápice su desaforado tren de vida, descubriendo además continuos escándalos. Me hace gracia que ahora nos vendan que el problema es el generado directamente por su nefasta gestión.

Mientras tanto tenemos un ministro de hacienda desastroso, chulo y prepotente, que se pasa el día con continuas y veladas amenazas a todo el mundo. Tenemos un fulano cuyo único interés es fiscalizar nuestras vidas cada día más, que echa siempre la culpa al inocente y exculpa al culpable y al beneficiado. ¿Y todavía se sorprenderán de sus pérdidas de votos? Ser socialistas y vendernos liberalismo es lo que tiene. La solución a todo esto no sería tan complicada pero, entonces, a lo mejor ellos tendrían que sacrificarse también, y eso no ¿verdad?