Albert Rivera si que te pone nervioso a ti, Pablo Iglesias

Los que estamos acostumbrados a tratar con mucha gente por motivos de trabajo y a tener largas conversaciones y debates con ellos ya nos las sabemos todas. En eso, como en otras muchas cosas, la experiencia es un grado y cuando tienes que argumentar para ofrecer algo y se te olvida algún dato o tienes que rebatir y argumentar para convencer sabemos como actuar. Esas milésimas de segundo tan necesarias en las que nuestro cerebro tiene que pensar, por una respuesta no esperada o por un simple olvido se camuflan. Yo no voy a confesar ahora qué es lo que hago, o como camuflo ese tiempo, no voy a enseñar mis cartas ante tanta gente.

El caso es que vemos lo de los demás a la legua, aunque la mayoría de las veces callamos y nos hacemos los tontos ya que es otra manera de tener esa charla ganada. En ese asunto, como en otros muchos, un personaje como Pablo Iglesias es para mi un libro abierto. Con lo poco, o nada, que me gusta he de reconocer sus virtudes. Es un gran orador, persona acostumbrada a debatir y hablar en público, además domina muy bien las cámaras, actúa bien. Pero tiene un gran defecto, se quiere demasiado, está muy acostumbrado a jugar en casa con el público a favor y cuando pierde un debate se le nota demasiado porque pierde también los papeles.

Hay personas, además, que le tienen absolutamente comida la moral y que son rivales directos. Una de esas personas es Albert Rivera. Cada vez que han tenido oportunidad de debatir Iglesias y Rivera le ha zurrado, este último, por todos los lados. Rivera es también muy bueno pero con una gran diferencia, tiene mucho menos populismo y demagogia, no como el amigo Pablo que anda sobrado. El populismo y la demagogia son muy fáciles de tumbar, e incluso humillar, siempre que se tenga mucha habilidad en el debate. Es evidente que Rivera tiene esa habilidad y que le tumba con un KO en el primer asalto a Iglesias en todos los debates, eso lo sabe Rivera, pero también lo sabe Iglesias.

En el programa de Carlos Herrera en Cope del día 13 de Enero entrevistaron a Pablo Iglesias y posteriormente a Albert Rivera. Iglesias, lejos de abandonar el micrófono cuando le correspondía a Rivera ser entrevistado, siguió interviniendo intentando buscar un debate con Rivera. Evidentemente enfadado le echaba en cara a Rivera el apoyo que este había dado junto a PP y PSOE para formar la mesa en el Congreso. Al hablarle de su "bunkerización" con la "antigua política" y con "partidos corruptos", Rivera le contestó que simplemente se habían puesto de acuerdo tres partidos que representaban a la inmensa mayoría de los votantes. Cree Iglesias ser él sólo el representante de "los buenos" en España, él se cree que sólo su partido es el bueno y que sólo son buenos sus votantes. 

Como era otro debate más perdido para Iglesias, este, utilizó con Rivera esa estrategia del "necesito pensar", "no se que decir" y "vaya castañazo que me ha pegado". No se le ocurrió decir nada nuevo, se le ocurrió decir lo que es ya un habitual en Iglesias, el famoso "Albert no te pongas nervioso". A lo que Albert contestó que probablemente el nervioso fuera el propio Iglesias por no haber conseguido su objetivo de cuatro grupos parlamentarios algo no legal, por cierto.

Nadie es perfecto y, a pesar de lo que crea Pablo Iglesias, él tampoco. Ese es su gran talón de Aquiles, su absoluta falta de autocrítica. Como se dice habitualmente: no tiene abuela. Si a su populismo, demagogia y falsedad, añadimos también su absoluta falta de autocrítica le auguro muchas salidas de ese tipo. Me da la sensación que a partir de ahora el "no te pongas nervioso" de Iglesias se va a convertir en más usado por él que la palabra "casta". El Congreso de los Diputados no es La Sexta, ya no juega en casa y no tiene periodistas sectarios que le defiendan. ¿Estará Iglesias preparado para esa prueba? Yo no soy adivino, pero me temo que no.