El chantaje legal del Estado mafioso

Cuando estudiamos la historia del mundo en general, y la de España en particular, observamos las diferentes formas de gobierno que ha conocido la humanidad. Nos sorprendemos del feudalismo, de las dictaduras, de los reinados de reyes déspotas...pero analizando la época actual nos damos cuenta que la forma puede haber cambiado, pero no el fondo.

Cuando sobra el dinero los problemas parecen ser menores e incluso inexistentes, pero cuando falta el dinero estos problemas enseñan sus colmillos provocan el terror del ciudadano y su sufrimiento, pero también dejan entrever el auténtico engaño que supone el supuesto estado democrático y el mal llamado estado del bienestar.

La primera mentira es el intentar convencer al ciudadano que las cosas se hacen por y para él, nos suben impuestos por nosotros, por nuestro bien. El mejor sitio donde está el dinero de cada persona es en su propio bolsillo, yo no necesito que nadie me gestione mi dinero, entiendo que haya que pagar cierta cantidad de impuestos para mantener ciertos servicios públicos pero hasta ahí, y basta.

Hemos llegado a un extremo en que tenemos tal carga impositiva que, con lo que sobra, el ciudadano consigue solamente sobrevivir. Los servicios públicos para los que, en teoría, se recauda ese dinero son unos servicios derrochones en su mayoría y absolutamente inservibles.

Todo esto provoca que no se genere riqueza dentro de nuestro país, ya que la mayor parte de las personas no pueden gastar y que haya un fraude con el que las personas lo único que pretenden es disponer de algo más de dinero y sacar adelante a sus familias. Aquí aparece el Estado del chantaje, el estado de las amenazas, o pagas o atente a las consecuencias, es la mafia del Estado. Si este mensaje en lugar de venir del Estado viniera de otro lado hablaríamos de delitos, de chantajes y de secuestros, al venir del Estado legaliza el delito.

No sé si será políticamente correcto o no, pero yo no creo en el Estado. No creo en mi incapacidad mental para operar con mi dinero, no creo que yo tenga que pagar un alquiler por vivir en mi país, no creo que las riqueza de un país la tenga que generar el estado, la generan los ciudadanos del país. El estado es necesario para no vivir en la anarquía, pero hasta ahí y punto. Yo creo en la libertad del individuo, en la propiedad privada, creo que cada uno debe recoger el premio de su propio esfuerzo sin que venga nadie a quitarle parte de su dinero.

A mi me gusta ver a la mafia sólo en el cine.